lunes, 31 de marzo de 2014

                                  Leydi Gore




Esta noche y como cada noche me dispongo a seguirte sin que me veas, sin que sientas que estoy a tu lado, te sigo, soy tu sombra, tan sigiloso como aquel pelo que se desprende de tu melena, va cayendo de a poco mientras baila con el viento y desaparece en la oscura noche, así de cauteloso soy.
  Esta noche, y como todas las noches sales de cacería con la chaqueta y los pantalones de cuero, las uñas pintadas de negro y los labios delineados con el color característico de la sangre.

Como olvidar la vez que te conocí allí por lo barrios bajo de “Eneles”, caminabas tù con la chaqueta que se extiende cual si fuese una magnifica capa. Se te acercaron unos tipos con intenciones nada respetables, mientras yo veía desde un tejado la hermosa Luna que cubría con su manto misterioso a todos. Luna, a quien siempre veía con embeleso, buscaba a una mujer que me recordara a la Luna; fue entonces que te divisè, tan hermosa con esa mirada endemoniada, de ojos oscuros como la noche, como si los Dioses hubiesen escuchado mis suplicas.
Sentì miedo de que esos sujetos te hicieran daño, pero no, salías en busca de diversión, te inclinaste haciendo un gesto de reverencia diciendo:  
-Buenas noches caballeros. Fue entonces cuando me interese en ti.
  En el momento en el que te inclinaste un poco, fue una distracción.
Entonces mi delirio por ti empezó el ver lo que estaba por ver.
  Sacas una espada y la incrustas en el cuello de uno de los tipos (que eran tres en total) y lo dejas colgado en la pared; para los siguientes sacas tus dagas de tus botas una queda clavada en el ojo izquierdo dejándolo abatido mientras suelta un grito ensordecedor; la gente de “Eneles” no hará nada; ya se dio el toque de queda por los extraños sucesos que ocurren por la noche, allí en las sombras da aquel callejón  nadie te puede ver, nadie mas que yo, tu fiel admirador.
 El último tipo que queda le das una estocada en el corazón.
 Terminó los previos, ahora viene el clímax, la hora de tu diversión.

 Te diriges hacia el primer tipo, el que dejaste colgado en la pared con la espada en el cuello, de repente dejas ver una daga que aun tenias en una de tus botas (la izquierda para ser mas exactos) haces un incisión por todo el tórax y abres su piel raudamente cual si fuese un abrigo ves todos sus órganos tan excitada que sonríes hermosamente, tus ojos brillan como cuando un niño encuentra dulces al abrir la piñata que anteriormente golpeó. Ahora tu eres la niña extasiada por la fantástica visión que tienes frente a ti, coges lo órganos y los pasas por tu rostro tan hipnotizada y llena de placer lames la sangre que se drena sobre tu faz con premura.

 El otro sujeto parece estar aun consciente aun, el que tiene la daga clavada en el ojo izquierdo, te diriges hacia èl, un nudo en las manos es lo ideal para continuar con tu diversión y comienzas a desprender toda su piel con las uñas, estas tan encantada que no puedes evitar soltar una melodiosa carcajada.
Se me ocurre entonces llamarte “Leydi Gore” al no saber tu nombre. Mientras pienso en tu nombre ya estas acabando con el tercer sujeto  indagando en su espina dorsal.

-Fue tan perfecto ese dìa- murmuro, mientras vuelvo a recordar.

Me siento tan inspirado esta noche con la Luna llena y tù, por empezar el espectáculo.
Ya vas a empezar, mientras yo cojo mi lápiz y lo alzo hacia el cielo para dirigir mi orquesta.
Cada movimiento tuyo es un instrumento.
El espectáculo ya va a empezar.

Movimientos lentos… violines
Estocada… trompetas
Corte… piano
Desmembramiento… saxofones…
Movimientos rápidos… canto

La orquesta toco toda la noche sin descanso.
Fue un show estupendo.

Esta noche me propongo escribirte algo:


Leydi Gore mi amada, que con tus encantos haces que me enamore
soy tu fiel admirador, quien siempre te observa
soy quien te aplaude aquí, desde el silencio
rogando que la noche dure para siempre, viendo el amanecer con desprecio
una encantadora dama
por la cual daría mi alma
verte ahí, realizando actos que te llenan de tanto jubilo
me hace pensar en la vida que podríamos tener juntos
realizando ambos lo que mas nos gusta
tù, dando rienda suelta a toda tu locura
cometiendo asesinatos,
y yo, dirigiendo la orquesta y escribiéndote poemas
y al final de la jornada
amarnos, lívidamente sobre los cuerpos desmembrados.
Amarnos sin que nadie nos detenga
tù y yo, mi Leydi Gore.

Estoy decidido, esta noche te diré lo que siento no temeré al rechazo.
Saldré de las sombras, te mirare fijamente a los ojos y te diré que te amo.
Estoy seguro que lo diré, te diré que te amo aunque sea yo, tu siguiente vìctima.



  

                       

jueves, 16 de enero de 2014

Una visión sobre el amor

Es imposible conocer a una persona muy detalladamente como uno quisiera; en especial a esa persona que cambia tu mundo y lo cambia por completo, hasta ese roce… ese roce entre dos mundos que hasta entonces eran completamente distintos, y pasan a ser uno con el universo; ese rose del que os hablo es un beso, con tan sólo un beso de ese ser tan sublime que arriesgarías la vida por él.
Quisiera creer que cuando os refiero a “ser sublime” pensaran, no sólo en una persona hermosa por el exterior, por el contrario pensaran en aquel individuo que más bello por el interior (me refiero a sus sentimientos) ya que, nuestra sociedad nos suele introducir ideas muy erróneas sobre: “Como debe ser el aspecto de una persona”; y sólo nos enseña eso… que una persona es puro aspecto exterior y tratado comúnmente cono objeto y no como un ser que vive, siente, ama… por eso, no siempre la persona a la cual entregas lo mejor de ti es bella, pero aún con los defectos que pudiera tener hacen que la ames más.
Pero sin salirme de contexto para conocer bien a una persona hago mención al conocido refrán: “no juzgues a un libro por su portada” sino, por el contenido agradable que pudiera tener.

Es por eso que hago cierta comparación de una persona con un libro. Ya que no todo libro con una portada atraíble puede ser “el libro que buscas”; ya que hay libros con una portada exquisita (aún haciendo esta comparación) que parecen haber sido elaborados a detalle, pero con un contenido nada agradable y tal vez hasta absurdo.

Lo mismo pasa con una persona; puede que en el exterior sea la más encantadora del planeta, como si hubiera sido esculpida por el propio creador pero que, al ver sus actitudes, sus sentimientos (el contenido) resulta ser nada agradable hasta decepcionante. Quisiera mencionar aquellos libros de portada apacible y con contenido maléfico con una ideología retorcida que al mismo tiempo es tierna y encantadora, también es adictiva y diabólica con una concepción del mundo tan destructiva que haría llegar al máximo nivel del asombro.

Quisiera pensar que aquel libro que me encantaría poseer, sea aquel libro con portada regular y de contenido interesante lleno de actitudes de descubrimiento y apasionante con la verdad…
No podría recomendarte el libro que más te convenga (ya que en este escrito sólo te hago ver en términos comunes lo que ya tú sabes). Y por tanto a una persona se le juzga por sus actitudes, sus sentimientos y no por “una linda apariencia”; todos buscamos la felicidad, y la encontramos en aquella persona a la cual conoceremos bien mediante la convivencia diaria, el intercambio de ideas  y mostrar cariño, afecto… Y que buena muestra de ello que con un beso, donde las almas se encuentra y unen, lazos eternos…
Y entonces tal vez y, solo tal vez (hago una  mención más del tal vez ya que sería remoto pensar eso) se preguntaran, este humilde escritor con cual libro se identifica más. Y os responderé:


“Pienso que el libro que me describe mejor es aquel que posea una portada regular y con un contenido interesante; siendo este contenido maléfico y adictivo a la vez, que es apacible y romántico con una actitud de querer descubrir los misterios que aquejan al hombre...”


¿Que si soy persona?

Es una pregunta que he tratado de responder tantas veces con una visión cándida, y con el trivial concepto acerca del tema. Persona es aquel ser dotado de atributos con capacidad racional, consciente de sus actos etc. Pues os daré una nueva definición; ya que si es consciente de sus actos, porque se comporta como un demente, si es racional porque  realiza cosas sin sentido. Nuestra sociedad esta tan podrida de ideologías absurdas que en lugar de educar e instruir la mente por el contrario, la destruye y la vuelve más torpe. Tal vez todos se consideren personas, pues que así se; en lo que respecta a mi, prefiero dar un paso el costado y ser una raza distinta.

Ya que soy materia que no siente, que no se conmueve (aunque tanto anhelo amar) simplemente no lo hago, y no lo haré no por una cuestión de falta hombría (eso esta fuera de lugar); sino, para evitar esa arma de doble filo llamada “amor”. Que teniendo una hermosa amistad (al principio…) caes en esa felicidad tan profunda y aparentemente eterna que nada parece indicar que con el tiempo la comunicación cesará, ya tras largas torturas y rencor acumulado.

Terminará.

Quedarán como simples conocidos y en el peor de los casos lleguen a odiarse (ya lo he vivido). Y así estropear algo tan duradero como una amistad para luego sentir rencor en el corazón.

En todo caso la definición que os daría de persona podría ser:
“Ser imperfecto que atenta contra la vida de su entorno, que incumple las reglas establecidas, que no es consciente de sus actos, ya que por la crueldad de los mismos es un peligro para la vida, que no es racional porque no sabe elegir, que aparenta ser libre cuando nunca lo ha sido bajo este inmundo sistema que lo oprime. El peor de, los habitantes porque amenaza contra la vida de sus semejantes”.


Después de haberte dado todo este concepto te responderé con seguridad que:
“Soy materia que piensa y existe en este universo decaído por los actos de sus habitantes; que no expresa sentimiento alguno, ya que mis sentimientos y emociones los dejo en la poesía, en alguna prosa, algún verso; que toda su pasión descansa en algunos escritos, para no ser lastimado y no derramar alguna lágrima”.